24 de mayo de 2019.- La esgrima de Castilla y León está de enhorabuena cosechando grandes triunfos de la mano de tiradores de Burgos que dominan el panorama nacional y cosechan triunfos allá donde van.

Los tiradores de la Sala de Esgrima de Burgos han sido los grandes triunfadores en el campeonato de España cadete de Espada masculina, celebrado recientemente en Valencia, consiguiendo un total de cuatro preseas, con dos títulos de campeones de España, una plata y un bronce.

El Oro fue para Javier de los Mozos, la plata para Íñigo Eguiluz de la Sala de Esgrima de Burgos y el bronce para Miguel A. Chuzón del Club Cid Campeador.

Y por si fuera poco el combinado de la SAES-BU, formado por Javier de los Mozos, Íñigo Eguiluz, Diego López y Giorgi Gazdeliani, se alzó con el oro en la competición de equipos. Por otro lado el equipo femenino también del Sala Esgroima de Burgos, Saes, consiguieron el bronce con: Erika Cucala, Alicia Martínez y María Rodrigo.

En la competición de sable masculino, destacaron Mario Aguado con el puesto 11 y Javier Lucas con el 12. María de Lucas la 6ª, e Inés Valverde la 13ª. En florete Patricia Suarez la 18ª.

COMBINADO ESPAÑOL.-  Y si los cadetes tienen todo el futuro por delante, Álvaro Ibáñez y Manuel barguies son ya una realidad consiguiendo un magnífico cuarto puesto en la Copa del Mundo celebrada en París, donde los tiradores burgaleses acudieron como miembros de la selección nacional.

El tirador internacional de la Sala de Esgrima de Burgos y miembro de la selección nacional de esgrima, Álvaro Ibáñez, ha completado una competición espectacular formando parte del combinado nacional español en la primera cita por equipos del periodo preolímpico de espada masculina en París.

Álvaro participó en todos los encuentros siendo una pieza fundamental. En el primer duelo, ganaban a la selección danesa por un ajustado 43-44, mientras que en el siguiente España tuvo delante a la actual número uno del mundo, Rusia.

El combinado español comenzaba de forma brillante y se ponía por delante en el marcador. Los rusos apretaban en el fondo de la pista para provocar el ataque de los españoles, pero aguantaron como unos grandes profesionales y siguieron sumando puntos en el marcador. Al final, España se hizo con la victoria y pasó al cuadro de los 8 mejores cumpliendo el objetivo marcado por el seleccionador nacional. Sin embargo, los españoles querían más. Israel fue su siguiente rival. Álvaro Ibáñez, Yulen Pereira, Angel Fabregat y Manuel Bargues dejaban hasta la última gota de sudor en la pista y también conseguían la victoria con un Ibáñez imparable.

Francia les esperaba en la tarima de la semifinal para disputar el encuentro que le aseguraría la medalla, pero los franceses, muy seguros de su potencial, frenaban en  seco a los españoles, a los que se impusieron por 45-26 dejando la posibilidad de medalla en la lucha por el asalto del tercer puesto.

Los tiradores españoles, muy motivados, se enfrentaban a Italia. Pese a tener el marcador por encima en algunos momentos, no conseguían poner los tocados suficientes y perdían por un ajustado 39-37 que les dejó en la cuarta posición.